Las empresas offshore han estado en boca de todos debido al caso de los Panamá Papers. Sin embargo, no todas las personas saben cómo operan estas sociedades. Muchos se pueden sorprender ante la noticia que este tipo de compañías se consideran legales en algunos lugares del planeta. Lo que es ilegal, es el propósito que se les ha dado.
Para empezar, hay que conocer las características básicas de estas sociedades. Lo principal es que estas empresas se crean en países donde no realizan ninguna actividad económica. Como se ha mencionado en un artículo anterior, los paraísos fiscales benefician este tipo de compañías en sus territorios.
Las empresas offshore se fundan con el propósito de utilizar al lugar donde fueron creadas como domicilio fiscal. En conjunto con las normativas de países como Panamá, Andorra, Belice y otros países, se pueden obtener las siguientes ventajas:
– Protección de los activos de la empresa.
– Confidencialidad y privacidad bancaria a prueba de balas.
– Reducción de los pagos fiscales a los gobiernos.
Al constituir este tipo de compañías se puede evitar el pago de los impuestos de sucesiones o sobre el patrimonio. Asimismo, no se tienen que pagar los tributos que gravan la renta o el consumo. Además, los gastos de la creación de estas compañías son reducidos y bastante irrisorios comparados a las cantidades de dinero que se desvía.
Para dar un ejemplo de la facilidad de creación de una de estas sociedades, vamos a tomar como ejemplo a Belice. En este lugar no se tiene que pagar ningún impuesto al gobierno para fundar una empresa offshore. Además, en 24 horas ya se puede tener una nueva empresa recién salida del horno.
Solo hay un pago que se tiene que hacer para tener una sociedad en este paraíso fiscal. El costo del mantenimiento de una compañía está alrededor de los 595 euros al año. Las otras ventajas son que no se tienen que registrar las cuenta y que tampoco serán auditadas.
Lo más importante para los accionistas de las empresas offshore es que no hay un registro público donde se mencionen sus nombres. Los directivos que figuran como responsables de las compañías son solo nominativos. De hecho, los estudios de abogados suelen ofrecer los nombres para terminar los trámites.
En Panamá hay algunas reglas adicionales. Lo que está estipulado entre sus requisitos es que el estudio de abogados contratado sea panameño. El pago a los intermediarios puede elevar un poquito la factura llegando a alcanzar los mil dólares al inicio de las operaciones. Sin embargo, la tasa anual solo llega a los 300 dólares.
Esta es una manera de reducir los pagos de los impuestos, pero que no siempre tienen un buen final. Si estás interesado en reducir tu pago de impuestos u otros costos operativos, contacte con un servicio de outsourcing contable. Comunícate con los profesionales de TCA Soluciones Empresariales a través de los números 952 056 697 / (511) 510 1302 o escribiendo al correo cotizaciones@tcasoluciones.com para solicitar más información.